Artículo publicado originalmente en el blog de nuestro cliente, el LN Edgard Ayala Cantero.
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Con la tendencia eco friendly que se vive en la actualidad (de vuelta a lo natural), los frutos secos se han colocado como una opción mucho más saludable que los productos empaquetados como papas fritas, plátanos y otros preparados de diversos cereales que solíamos tener a la mano siempre para satisfacer el antojo o la ansiedad por comer.
Empezaré por darte ejemplos de los frutos secos más comunes en México y América Latina:
La verdad es que no son baratos, pero el beneficio que ofrecen a la salud bien vale lo que se paga por gramo de cualquiera de estos productos.
¿Qué los hace especiales?
Los frutos secos están compuestos de manera exepcional y por tanto aportan al humano muchos nutrientes, que dificilmente otro tipo de alimentos reune en una sola porción de una única especie.
Suelen contener al mismo tiempo:
Fibra: del 5% al 14% de su composición.
Vitaminas: particularmente la vitamina E, potente antioxidante que ayuda a mantener una piel sana y suave.
Proteínas: contienen del 10% al 17% de aminoacidos.
Grasas: tienen desde un 40% a un 70% de grasas de efecto positivo en la salud.
Minerales: muchos de los frutos secos contienen pequeñas cantidades de boro, selenio, manganeso, magnesio, cobre y zinc; considerados como cardioprotectores.
¿En qué me beneficia comer frutos secos?
Como habrás notado en la lista anterior, este tipo de alimentos aporta antioxidantes, calcio, proteinas y ácidos grasos que te ayudan con la digestión, la regeneración de tejidos, la protección del organismo y la prevención de enfermedades cardiovasculares. Te dan energía, reducen niveles de colesterol y cantidades moderadas ¡no te hacen aumentar de peso!
¿Existe alguna desventaja?
No te excedas. El alto consumo de un alimento particular o una monodieta puede afectar la funcionalidad del organismo. Tampoco es recomendable que los ofrezcas a niños menores de un año.
Recuerda que la mejor dieta es la que incluye diversos tipos de nutrientes (frutas, verduras, cereales, etc) ya que ningún alimento es, por sí mismo, completo y suficiente para mantenerte sano.
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Con la tendencia eco friendly que se vive en la actualidad (de vuelta a lo natural), los frutos secos se han colocado como una opción mucho más saludable que los productos empaquetados como papas fritas, plátanos y otros preparados de diversos cereales que solíamos tener a la mano siempre para satisfacer el antojo o la ansiedad por comer.
Empezaré por darte ejemplos de los frutos secos más comunes en México y América Latina:
- Almendras
- Nueces (en diferentes variedades)
- Semillas de girasol
- Semillas de calabaza
- Semillas de chía
- Piñones
- Cacahuates
- Linaza
La verdad es que no son baratos, pero el beneficio que ofrecen a la salud bien vale lo que se paga por gramo de cualquiera de estos productos.
¿Qué los hace especiales?
Los frutos secos están compuestos de manera exepcional y por tanto aportan al humano muchos nutrientes, que dificilmente otro tipo de alimentos reune en una sola porción de una única especie.
Suelen contener al mismo tiempo:
Fibra: del 5% al 14% de su composición.
Vitaminas: particularmente la vitamina E, potente antioxidante que ayuda a mantener una piel sana y suave.
Proteínas: contienen del 10% al 17% de aminoacidos.
Grasas: tienen desde un 40% a un 70% de grasas de efecto positivo en la salud.
Minerales: muchos de los frutos secos contienen pequeñas cantidades de boro, selenio, manganeso, magnesio, cobre y zinc; considerados como cardioprotectores.
¿En qué me beneficia comer frutos secos?
Como habrás notado en la lista anterior, este tipo de alimentos aporta antioxidantes, calcio, proteinas y ácidos grasos que te ayudan con la digestión, la regeneración de tejidos, la protección del organismo y la prevención de enfermedades cardiovasculares. Te dan energía, reducen niveles de colesterol y cantidades moderadas ¡no te hacen aumentar de peso!
¿Existe alguna desventaja?
No te excedas. El alto consumo de un alimento particular o una monodieta puede afectar la funcionalidad del organismo. Tampoco es recomendable que los ofrezcas a niños menores de un año.
Recuerda que la mejor dieta es la que incluye diversos tipos de nutrientes (frutas, verduras, cereales, etc) ya que ningún alimento es, por sí mismo, completo y suficiente para mantenerte sano.
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